Me sigo odiando. Sí, me odio. Siempre lo he hecho. Siempre me he odiado. Es algo que muy poca gente sabe y el resto pasa por alto. Sí, esa soy yo. La chica que no se quiere mirar al espejo por miedo a verse gorda y fea. La chica que no se quiere levantar de la cama porque odia el ruido que hacen sus pies al caminar. La chica con tendencia a la autodestrucción. Atada de pies y manos a las inseguridades, a los miedos, a ella misma. La chica que esconde los pedacitos rotos de su alma detrás de una falsa sonrisa cuando sale de casa. Esa chica que siempre dice que está bien cuando ni siquiera ha vivido el significado de esa palabra. La chica que no entiende que la gente la quiera porque ella se detesta así misma, detesta lo que ve. La chica que se esconde detrás de unas líneas manchadas de lágrimas desordenadas. Sí, esa soy yo.
Sandra Haya