Pequeña Freud

Historias que inspiran, expiran, y rezuman poesía.

Mentiría si dijera que no tengo miedo, que no me asusto cuando te acercas o no me consumo cuando te alejas, y te noto distante y fría, y nos noto acabados y sin final.

Mentiría si dijera que no me desarmas cuando sonríes, cuando pareces tener tan controlada la situación que te permites bromear con ella, cuando te tengo tan cerca y apagas la luz.

Mentiría si dijera que no me tienes cautivado. Que no me tienes. Porque me tienes, de principio a fin, de norte a sur, de cama a cama, y vuelta.

Mentiría si dijera que no te echo de menos cada vez que te vas, porque te echo de menos, porque yo tampoco, también, te quiero.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s